Resident Evil (2002), empieza una saga

A principios de siglo aun no era habitual ver películas basadas en videojuegos.  Los pocos intentos habían sido cosas como Super Mario Bros, Street Fighter: La última batalla, Double Dragon y Mortal Kombat a mediados de los 90 que no destacaban precisamente por su calidad. El problema era siempre el mismo: una combinación de falta de talento y presupuesto que terminaba hundiendo al conjunto en una cutrez impresionante. Parecía que el terreno de videojuego estaba abonado a ser una cosa de frikis y serie B.

En 2002 la generación PlayStation vio como Resident Evil venía a rellenar el hueco que faltaba en sus corazones. El proyecto nacía de alguien apasionado por el tema: Paul W. S. Anderson que ya había perpetrado lo de Mortal Kombat (película por la que siempre odiaré a mi hermano que me hizo llevarlo al cine a verla). Pero parece que Anderson aprendió algo de la evidente falta de medios que tuvo en la película protagonizada por Christopher Lambert. Para Resident Evil tomó conciencia de que iba a ser a una película de Serie B y a partir de ahí empezó a construir el resto y no al revés.

Salvando las distancias, Resident Evil podría haber sido una película dirigida por John Carpenter. Haciendo un eficaz uso del espacio cerrado en el que se desarrolla la acción, Anderson supo salir airoso del cara a cara con los aficionados y dar al espectador profano un buen ejercicio de cine de acción con unos toques gores. En mucho ayudó la que después se convertiría en su señora esposa. Milla Jovovich aportó su hipnótica belleza mostrando una gran destreza en las escenas de acción a las que ya estaba acostumbrada desde los tiempos de El Quinto Elemento.

La historia que contaba la película no entraba dentro del canon de los videojuegos y nos introducía al personaje de Alice, inventado para la ocasión. La Corporación Umbrella la liaba con un virus en unos laboratorios situados en un sótano y todos los que pasaban por allí se convertían en zombis. Un grupo de rescate intentaba salir de allí y poco más. Bien contando, de forma entretenida y abriendo paso a lo que vendría después.

Mañana seguiremos hablando del resto de la saga hasta culminar en la quinta parte que se estrenará el viernes. Jugad con nosotros.

Deja un comentario

You May Also Like

Festival de Sitges 2022: «Resurrection» de Andrew Semans

Cuesta creer a día de hoy que sigan existiendo películas que dependan tanto de la interpretación de un determinado actor para funcionar. Lo cierto es que Resurrection es una de…
Ver entrada

Philomena, no pasa nada por ser humanos

Todos los años surge una película en la carrera de los Oscars que parece completamente desubicada, ya que nadie contaba con ella en ninguna de las quinielas y se le…
Ver entrada

Ohlalà! Festival de cine francófono de Barcelona (y III): «Nos batailles» y «En buenas manos»

Nos batailles (****) El director belga Guillaume Senez confirma, tras la valiente y empática 9 meses, la especial sensibilidad de su pulso cinematográfico en su segundo filme: Nos batailles. Como…
Ver entrada