Sufragistas

Sufragistas, en lucha por una país más justo

A solo unos días para las elecciones generales en nuestro país, el Reino Unido nos presenta una película que aborda este tema haciéndose eco de un suceso importante para su historia a comienzos del siglo XX. Las sufragistas fueron un grupo organizado de mujeres de todos los estratos sociales que descontentas con la imposibilidad de poder votar decidieron dinamitar, nunca mejor dicho, el sistema político británico. En la sociedad de nuestro tiempo se mira con incredulidad los tiempos en los que las mujeres no tenían el derecho al voto y donde el sufragio universal era una utopía en muchos países de Europa. Este grupo de valientes mujeres, adelantadas a su tiempo se enfrentaron al poder, a la visión machista de algunos hombres y a un país anclado en leyes obsoletas y poco avanzadas.

Sufragistas

Carey Mulligan, la virginal protagonista de El gran Gatsby de Baz Luhrmann es Maud, una trabajadora a tiempo completo que curra desde que era una niña planchando y lavando en una fábrica, soporta la tiranía de su jefe y tiene que sacar tiempo de donde no lo hay para cuidar de su hijo y complacer en todo a su marido. Un día harta ya del abuso del poder de sus superiores y del trato vejatorio al que son sometidas sus compañeras en el trabajo por parte de los hombres decide actuar. Arriesgando su casa, su vida familiar y todo lo poco que ha conseguido con duro esfuerzo se une a este grupo comenzando una lucha sin cuartel contra un gobierno que no entiende como alguien como ellas se atreve a cuestionar sus leyes. Esta lucha de David contra Goliat parece que no tiene fin. Las cárceles comienzan a llenarse con estas rebeldes mujeres que son maltratadas, vilipendiadas en la calle y repudiadas por otras mujeres que no se dan cuenta que también están actuando en su nombre y que están defendiendo sus derechos.

Lo que empieza siendo una desobediencia popular acaba convirtiéndose en un ataque a las instituciones con heridos por ambas partes. Una terrible batalla con actos de vandalismo y represalias violentas que parece no acabar nunca. Pero siempre sale el sol, por mucho que las cosas se pongan muy negras, por mucho que el vaso parezca medio vacío, siempre hay un rayo de esperanza. Esto es a lo que se agarran tanto Maud como sus camaradas, una increíble Helena Bonham Carter, rara fuera de un film de Tim Burton, o Meryl Streep que encarna a la gran Emmeline Pankhurst, una de las más veteranas y líder de este movimiento. Gracias a ellas y a una cuidada ambientación, vestuario y maquillaje incluidos, nos creemos esta historia a pie juntillas.

Sufragistas

Sufragistas es un film que te hace pensar, que te obliga a  mirar de frente a una injusticia y que enseguida te atrapa posicionándote al lado de este grupo. No es una lucha de sexos, no es una lucha entre clases sociales, es un feroz combate entre la irracionalidad y lo razonable. El tiempo al final es sabio y pone a cada uno en su sitio. Gracias a Dios las sufragistas solo fueron la avanzadilla de una masificada postura y corriente triunfadora algunos años más tarde. Este tipo de películas nos recuerda por qué debemos enfrentarnos a un mundo imparcial donde priman más los intereses de unos cuantos que los de toda la ciudadanía. Pone en tela de juicio principios y valores hasta esos momentos incuestionables intentando provocar una respuesta en nosotros. En mi persona al menos ha tenido ese efecto.

Veo las cosas de diferente manera, de verdad es preferible morir de pie a vivir de rodillas aunque a veces intenten doblegarte a base de golpes como hicieron por desgracia con nuestras queridas sufragistas. También ha debido tener ese mismo efecto sobre aquellos que escriben en algunos de los diarios y revistas más importantes del mundo como son Elle, The Times, The Guardian, Daily Mail o The Telegraph que han puesto al trabajo de Sarah Gavron por las nubes al recibir por su parte alabanzas y críticas muy positivas.

 

2 comments

Deja un comentario

You May Also Like

Sitges 2014: Adieu au langage, incansable Godard

Resulta muy difícil valorar Adieu au langage, una película que apenas tiene características cinematográficas. Godard es probablemente el mejor director de cine vivo que hay en nuestro planeta; y tras cruzar…
Ver entrada

Blackhat, amenaza en la red, entre la acción y la contemplación

Con la edad, como le pasa a muchos, Michael Mann se está radicalizando en sus propuestas. Si el anacronismo digital que proponía Enemigos públicos distanciaba lo suficiente como para que…
Ver entrada

Scream 4, a la altura de las circustancias

Por fin conseguí sacar tiempo para ir al cine a ver Scream 4. Mentiría si dijera que no tenía muchas ganas, porque como pudisteis ver en el post aquel le…
Ver entrada